La cooperación es fundamental para hacer frente a las amenazas al patrimonio cultural
Tres proyectos, financiados a su vez a través del proyecto HERITAGE PLUS (ERA-NET Plus on Cultural Heritage and Global Change Research), han aplicado con éxito la tecnología espacial para controlar la vulnerabilidad del patrimonio cultural, han elaborado manuales prácticos sobre amenazas para su uso por parte de los Gobiernos, las organizaciones internacionales y las ONG, y han desarrollado herramientas nuevas para conservar de manera rentable los tesoros culturales de Europa. Estos proyectos financiados con fondos europeos subrayan el valor de reunir los conocimientos especializados y los recursos de toda Europa para proteger nuestro patrimonio europeo compartido. HERITAGE PLUS es una acción ERA-NET Plus coordinada por la Iniciativa de programación conjunta sobre patrimonio cultural y cambio mundial (JPI CH). Recibe financiación complementaria de la Comisión Europea para apoyar proyectos transnacionales de investigación sobre cuestiones como el patrimonio cultural material y el desarrollo de nuevas metodologías, tecnologías y productos para evaluar, proteger y gestionar los objetos, edificios y lugares históricos y modernos. Cristina Sabbioni, una de las coordinadoras de la JPI CH, explica: «La iniciativa HERITAGE PLUS fomenta la excelencia y la competitividad europeas a partir del desarrollo de los conocimientos actuales sobre los retos a los que se enfrenta el patrimonio cultural con el fin de prever sus cambios en el futuro. Esto se hace mediante la integración de las decisiones políticas y de la dinámica medioambiental para comprender el impacto sobre el patrimonio cultural material, inmaterial y digital». Ojos en el cielo Uno de estos proyectos es Prothego (PROTection of European Cultural HEritage from GeO-hazards), el cual, por ejemplo, ha introducido técnicas de vigilancia por satélite para analizar los peligros geológicos en sitios europeos incluidos en el Patrimonio de la Humanidad elaborado por la Unesco. Estos sitios, desde complejos arqueológicos hasta cascos históricos de las ciudades, a menudo se ven afectados por peligros naturales como las condiciones climatológicas extremas, las cuales se han visto empeoradas por el cambio climático y la acción del hombre. «No se ha publicado una perspectiva completa de los sitios afectados por peligros geológicos», explica el coordinador del proyecto Prothego Daniele Spizzichino, del Instituto italiano para la Protección y la Investigación ambiental. «Esta falta de información ha hecho que no se cuente con evaluaciones de la vulnerabilidad del patrimonio cultural». Las técnicas de supervisión de bajo impacto por medio de satélites tienen el potencial de detectar de forma temprana vulnerabilidades y ahorrar fondos en actividades de recuperación posteriores a una catástrofe. Uno de los principales resultados de este proyecto ha sido el éxito en la aplicación de nueva tecnología espacial al sector del patrimonio cultural, que permite supervisar la deformación de la superficies con una precisión milimétrica. Se han analizado más de cuatrocientos sitios del Patrimonio de la Humanidad elaborado por la Unesco y se han integrado los datos en las bases de datos existentes sobre peligros geológicos. Esto permite al equipo del proyecto, que trabaja en estrecha colaboración como el Consejo británico de Investigación del Entorno Natural y la Universidad Tecnológica de Chipre, identificar y clasificar los sitios de patrimonio cultural que corren un mayor riesgo en el conjunto de Europa. «El proyecto Prothego ha logrado unir con éxito la conservación del patrimonio cultural con la ciencia espacial y de la Tierra», afirma Spizzichino. «Se han identificado y promovido nuevos mercados potenciales para las técnicas de supervisión de bajo impacto. Tenemos la esperanza de que el enfoque de Prothego se amplíe y aplique en todo el patrimonio cultural europeo (y no solo en los sitios incluidos en la lista del Patrimonio Mundial de la Unesco)». Comprender las amenazas al patrimonio cultural y el cambio mundial El proyecto HeAT (Heritage and Threat) también ha abordado las lagunas en nuestros conocimientos sobre las amenazas a las que se enfrenta el patrimonio cultural, algo que puede limitar la eficacia en la formulación de políticas y la intervención. El proyecto quería abordar esta situación a través de lo siguiente: un análisis sistemático de las amenazas a lo largo de distintas ubicaciones geoculturales; elaboración de manuales prácticos para su uso por parte de Gobiernos, organismos internacionales y ONG, y celebración de pequeñas exposiciones que inviten a la reflexión, con el objetivo de divulgar algunos de sus hallazgos. «Por ejemplo, se han publicado diversos libros que han documentado sitios de patrimonio amenazados y cuestionados de Rumanía y Polonia», afirma Ingolf Thuesen, coordinador del proyecto en la Universidad de Copenhague, Dinamarca. «Se ha desarrollado una plataforma web para comprender mejor y visualizar la destrucción de los paisajes culturales a través de superposiciones de mapas, así como un cortometraje acerca del impacto sobre el patrimonio cultural de los proyectos de construcción de presas en Oriente Próximo y Egipto». Conocer mejor los procesos que pueden causar la destrucción del patrimonio cultural ayudará a los responsables políticos a desarrollar estrategias más proactivas. A finales de 2018, se presentará una publicación titulada «Conflict and Culture» (Conflicto y cultura) junto con una exposición itinerante. «Aunque los hallazgos del proyecto ofrecerán información académica, también queremos compartir nuestros resultados con círculos no académicos y eliminar las lagunas entre la investigación sobre el patrimonio y la política, la toma de decisiones y los conocimientos relativos al patrimonio», añade Thuesen. Conservación de paisajes arqueológicos Por su parte, el proyecto CLIMA (Cultural Landscape risk Identification, Management and Assessment) se ha centrado en abordar las amenazas a las que se enfrenta el rico paisaje arqueológico europeo. Se ha desarrollado una herramienta multitarea, práctica y asequible, que ofrece a los responsables de la toma de decisiones mapas de riesgos y advertencias sobre sitios, así como un servicio comercial para supervisar la degradación y la planificación de actividades preventivas de conservación. Esta herramienta hace un amplio uso de datos obtenidos vía satélite procesados y de datos basados en el terreno. «El proyecto CLIMA es un demostrador de una tecnología y un enfoque específicos de la conservación del patrimonio cultural», explica el coordinador del proyecto CLIMA Stefano De Angeli, de la Universidad de la Tuscia, en Italia. «El modelo de servicio se basa en la supervisión continua y la previsión de riesgos, que activa intervenciones preventivas de restauración en lugar de tener que esperar a llevar a cabo acciones de rehabilitación mucho más caras, cuando ya sea demasiado tarde. Creemos que este modelo tiene el potencial de extenderse a cientos de sitios en Italia y Europa». La protección de los yacimientos y los paisajes arqueológicos tendrá también un impacto económico favorable sobre las regiones del entorno, que a menudo dependen del turismo. «Una importante lección de este proyecto ha sido la importancia de mantener una estrecha comunicación entre los socios», afirma De Angeli. «Hemos logrado incorporar disciplinas, como la observación de la Tierra mediante sensores remotos, que hasta ahora no se habían explotado completamente. Esto nos ha permitido realizar importantes avances en nuestra comprensión de los paisajes culturales arqueológicos».
Palabras clave
HERITAGE PLUS, Prothego, HeAT, CLIMA, patrimonio cultural, JPI CH, cambio climático, catástrofes, amenazas, riesgos, conflictos, destrucción, restauración, arqueología, paisajes, rehabilitación, satélites, supervisión, Unesco, sitios del Patrimonio de la Humanidad elaborado por la Unesco
