El tratamiento industrial del vidrio con láser es mejor para el medio ambiente
«La industria del vidrio sigue utilizando el anticuado método mecánico de transformación, que requiere mucha energía y genera residuos como, por ejemplo, las virutas de vidrio no reciclables. Así que nuestro objetivo y motivación era transformar este proceso inveterado y hacerlo más sostenible», explica el coordinador del proyecto GLAZER, Erik Raita, director de operaciones de Hypermemo(se abrirá en una nueva ventana), empresa finlandesa de tecnología láser. El vidrio mecanizado por láser tiene el mismo aspecto que cualquier otro vidrio, pero el proceso transforma el corte, el biselado, el tratamiento superficial, el marcado y el grabado, utilizando una única herramienta multifuncional, por lo que el nuevo proceso reduce el mantenimiento de diferentes máquinas. «Normalmente, cada uno de estos procesos se lleva a cabo con maquinaria especializada», señala Raita. «El láser es un componente esencial del equipo, que combina varias máquinas en una», explica Raita, a lo que añade: «Así disminuimos la huella de carbono de la fabricación de máquinas».
Reduce la energía y la contaminación
Además, «la maquinaria láser sustituye la necesidad de gas, que actualmente se quema de forma intensiva en la industria del vidrio, lo cual reduce el consumo de energía», señala Raita. El lijado mecánico para alisar los bordes ásperos que se han cortado con métodos tradicionales a base de muelas es descrito por Raita como un proceso desagradable que utiliza mucha agua. El lijado mecánico también genera una gran cantidad de residuos de virutas de vidrio potencialmente peligrosos y que son difíciles de eliminar. Pero el proceso asistido por láser hace un corte limpio en el cristal. «Elimina por completo el lijado, que no solo es costoso y contaminante, sino que hoy día supone un enorme quebradero de cabeza para la industria», afirma Raita.
Prototipo a escala
El proyecto, de tres años de duración, comenzó con un prototipo de láser totalmente funcional. Raita explica: «En ese momento, se podía demostrar la viabilidad del tratamiento del vidrio mediante láser a pequeña escala: en una superficie de 10 cm por 10 cm. Había que ampliarlo para su uso industrial, desarrollar la maquinaria en torno al láser, validar la tecnología y realizar pruebas con empresas». Pero la ampliación planteó retos a la empresa especializada. «Tuvimos que desarrollar un sistema de control de movimiento para desplazar el rayo láser por la mayor superficie de procesamiento (de vidrio). Ello requería maquinaria controlada por ordenador, por lo que tuvimos que desarrollar conocimientos y competencias en este ámbito, incluyendo ingeniería mecánica, ingeniería de «software» e ingeniería óptica, combinadas para construir la maquinaria en torno al láser». Sus esfuerzos dieron fruto, afirma Raita, y añade que la máquina láser puede utilizarse con grandes superficies no solo de vidrio plano, sino también de vidrio moldeado, lo que la hace idónea para la industria automovilística, así como para el sector de la construcción.
Un resultado respetuoso con el medio ambiente
La operación totalmente automatizada utiliza un 90 % menos de consumibles y genera un 80 % menos de residuos, lo que reduce la huella de los equipos y disminuye de forma drástica la huella de carbono, según evaluaciones independientes. El vidrio producido de esta manera no solo es más resistente que el convencional, sino que las herramientas de evaluación de impacto desarrolladas por la Universidad Tecnológica de Delft(se abrirá en una nueva ventana), en los Países Bajos, certificaron que con más de 60 000 t de vidrio procesado de esta manera al año, el sistema podría mitigar potencialmente 120 t de emisiones de gases de efecto invernadero al año. «Nuestra tecnología podría transformar el procesamiento industrial del vidrio y, por ahora, continúan las pruebas con los principales fabricantes de vidrio y proveedores de equipos», afirma Raita. Entre ellas hay empresas de Japón, Turquía y el Reino Unido que también operan en Europa. Exponer en una gran feria del sector en Alemania generó mucho interés y atención entre los agentes de la industria, lo que dio lugar a negociaciones con posibles compradores, comenta Raita. «Creemos que firmaremos los primeros contratos comerciales a finales de este año», señala Raita.