Skip to main content
Ir a la página de inicio de la Comisión Europea (se abrirá en una nueva ventana)
español español
CORDIS - Resultados de investigaciones de la UE
CORDIS

Article Category

Article available in the following languages:

¿Cómo se encuentra agua en la Luna?

El agua de la Luna podría utilizarse como agua potable o combustible para cohetes, pero ¿cómo y dónde podemos encontrarla? Nuestro experto Luca Kiewiet nos lleva a la superficie lunar en busca de recursos congelados.

«Tenemos una idea muy clara de dónde podemos encontrarla», afirma Kiewiet, investigador del DLR, el Centro Aeroespacial Alemán(se abrirá en una nueva ventana). «Debe estar cerca de los polos». Debido al profundo vacío del espacio, el agua líquida no puede existir en la Luna. Sin apenas presión atmosférica, una gota de agua simplemente se convertiría en gas y flotaría por la superficie hasta llegar a un punto lo suficientemente frío como para condensarse en forma de hielo, donde permanecería durante un largo periodo. Así pues, los lugares más prometedores para buscar agua, y donde hemos encontrado pruebas de ella, son los polos lunares. Aquí, grandes y profundos cráteres están permanentemente a la sombra del sol, lo que proporciona el frío constante necesario para que el hielo sobreviva durante miles de millones de años. En 2009, con la misión LCROSS de la NASA se buscó hielo en un cráter cercano al polo sur de la Luna. Al llegar a la Luna, una parte agotada del cohete se estrelló deliberadamente contra el cráter para expulsar una columna de escombros. A continuación, una sonda científica de seguimiento voló a través de la columna para analizarla y halló indicios claros de la presencia de agua. Otros modelos sugieren que podría existir hielo de agua en «microtrampas frías»: regiones situadas justo debajo de la superficie lunar que parecen ser lo suficientemente frías. «Eso estaría bien, porque es mucho más fácil llegar a ellas», dice Kiewiet. «No tener que adentrarse cuatro kilómetros en un cráter extremadamente frío con tu diminuto róver es, por supuesto, mucho, mucho mejor», añade. Encontrar agua en la Luna es clave para las futuras misiones espaciales, ya sea para establecer bases lunares o para alimentar los viajes espaciales. El agua lunar podría convertirse en combustible para los cohetes, con el que los astronautas podrían regresar a la Tierra o, tal vez, seguir viaje hasta Marte. En el proyecto LUWEX, Kiewiet y sus colegas desarrollaron un sistema diseñado para procesar el regolito lunar y extraer agua de su interior. Probaron su sistema en regolito simulado en condiciones similares a las de la superficie lunar, purificando el agua extraída mediante una serie de métodos. Consiguieron recoger agua que, o bien sería lo bastante segura para que la bebieran los astronautas, o bien podría convertirse en combustible para los cohetes. Las observaciones a distancia se utilizan para buscar posibles fuentes de agua en la Luna, aunque solo se puede observar unos metros por debajo de la superficie. Así que es posible, dice Kiewiet, que si cavamos más profundo, encontremos trozos de hielo más grandes. «Esto es muy desconocido, pero la esperanza es, por supuesto, que haya más para que podamos utilizar más», señala. También son de interés para las agencias espaciales los bordes de los grandes cráteres permanentemente ensombrecidos de los polos. Si estuviera de pie sobre uno de estos bordes, estaría bajo un sol casi permanente, probablemente con hielo de agua a sus pies. «Tiene el recurso que más fácilmente podría proporcionarle un buen propulsor para sus cohetes», explica Kiewiet. «Y justo al lado está el lugar donde más fácilmente se puede cosechar energía solar». Haga clic aquí para saber más sobre la investigación de Luca Kiewet: Un sistema de extracción de agua para la Luna.

Artículos conexos

Mi folleto 0 0