Reformular el compromiso de la UE con los derechos humanos Con financiación aportada por la Unión Europea, una serie de investigadores están reformulando el compromiso de la Unión con los derechos humanos con el fin de dar una respuesta más eficaz a los múltiples desafíos internacionales en esta materia. Sociedad © Jabob_09, Shutterstock En el Tratado de Lisboa, la UE adquirió el compromiso de defender y promover sus valores, incluidos los relativos a los derechos humanos. Sin embargo, este compromiso concreto se está enfrentando a numerosos desafíos, incluidas las diferentes crisis financieras de los últimos años, a las que se añade la actual crisis de los refugiados. Todos estos desequilibrios han puesto a la Unión Europea en serios aprietos y suponen un obstáculo al constante propósito de la Unión de encontrar respuestas adecuadas que tengan en cuenta los derechos humanos. El proyecto FRAME, financiado con fondos europeos, nació con el objetivo de reformular ese compromiso del continente con los derechos humanos, en un entorno de desafíos mundiales cambiantes. La finalidad de FRAME era aportar los elementos constructivos necesarios para el desarrollo y la puesta en marcha de una política integral de la Unión Europea en materia de derechos humanos. «FRAME se ha concebido para que la UE cuente con una línea de investigación estratégica y orientada a las políticas que le permita abordar estos desafíos y contribuir al desarrollo de una política integral y consistente; de este modo, la UE podrá cumplir con su compromiso en materia de derechos humanos», afirma el coordinador del proyecto Jan Wouters, catedrático de la Universidad Católica de Lovaina (Bélgica) y director del Leuven Centre for Global Governance Studies. «El proyecto logró aportar tres elementos constructivos fundamentales que permitirán a la UE redefinir su compromiso frente a los derechos humanos de un modo que se adapte mejor a los desafíos del presente». Elementos que contribuyen a la protección de los derechos humanos El primer elemento a aportar consistía en crear una base sólida de conocimientos que tuviese en cuenta los factores cambiantes, conceptos, instituciones e instrumentos que intervienen en la protección y promoción de los derechos humanos en las esferas nacional, de la UE e internacional. El segundo elemento implicaba un análisis y evaluación críticos de la contribución real y potencial de la UE a la gestión de los derechos humanos a nivel mundial, mediante su implicación y colaboración con múltiples actores y socios y a través de diferentes políticas e instrumentos. Por último, el tercer elemento lo componían una serie de indicadores, herramientas y propuestas políticas que permitan una integración uniforme y tangible de los derechos humanos en las iniciativas y políticas tanto externas como internas de la UE. Soluciones prácticas para unos resultados tangibles «La labor del proyecto se plasmó en resultados muy variados, incluida la publicación de más de cincuenta informes globales que analizan una a una la práctica totalidad de las competencias de la UE y las comparan con los compromisos del continente en materia de derechos humanos», señala Wouters. «Esto supone más de 10 000 páginas de datos, publicados ya en la página web de FRAME y a disposición de los encargados de la formulación de políticas de la UE, la sociedad civil y el público en general». Según Wouters, esta base de datos es la más nutrida actualmente a nivel mundial acerca de la cuestión de la UE y los derechos humanos. Además de esta base de datos, el proyecto FRAME ha plasmado sus conclusiones en diferentes informes de políticas dirigidos a los legisladores. También en el marco de FRAME se ha elaborado un documento de resultados que resume las cuarenta recomendaciones principales de una manera clara y de fácil lectura. Señala Wouters que este documento puede servir como hoja de ruta para que las instituciones de la UE reajusten adecuadamente su compromiso en materia de derechos humanos. El proyecto ha abierto también nuevos horizontes con la organización y oferta, de manera gratuita, de un curso en línea masivo y abierto (CEMA) dedicado al compromiso de la UE con los derechos humanos. Este CEMA, que parte de las conclusiones de las investigaciones de FRAME y que imparten los propios investigadores del proyecto, ha logrado atraer a más de 12 000 alumnos de 175 países. FRAME ofrecerá de nuevo este CEMA a partir del 2 de octubre de 2017. «FRAME ha ofrecido una serie de soluciones creativas que permitirán mejorar la eficacia y la coherencia de la política de la UE en materia de derechos humanos», concluye Wouters. «Básicamente, FRAME ha proporcionado a los responsables de la formulación de políticas de la UE unas directrices concretas que les ayudarán a resolver los problemas que obstaculizan la protección y promoción de los derechos humanos en la Unión y en el mundo». Los investigadores de FRAME han expresado su esperanza en que los legisladores tomen buena nota de las conclusiones obtenidas, y por fortuna, ya hay señales de que así es. En este sentido, el «Informe del Parlamento Europeo sobre los derechos humanos en la política comercial de la UE» se basa en gran medida en los resultados del proyecto FRAME. Palabras clave FRAME, Unión Europea, Tratado de Lisboa, derechos humanos
