Skip to main content
Ir a la página de inicio de la Comisión Europea (se abrirá en una nueva ventana)
español español
CORDIS - Resultados de investigaciones de la UE
CORDIS
How cellular suicide programmes control phase transitions in fatty liver disease and liver cancer

Article Category

Article available in the following languages:

¿Los «zombis» convierten la esteatosis hepática en carcinoma hepatocelular?

Comprender cómo el organismo favorece la muerte controlada de las células podría sentar las bases para nuevos métodos para tratar el carcinoma hepatocelular.

La obesidad va al alza y, con ello, también el número de personas que desarrollan síndrome metabólico(se abrirá en una nueva ventana). «Mientras que complicaciones como las enfermedades cardíacas, la hipertensión y la diabetes se han estudiado en detalle y, a menudo, pueden tratarse con medicación, la esteatosis hepática y sus posibles consecuencias se conocen mucho menos y, por lo tanto, son más difíciles de tratar», explica Tom Luedde, catedrático y director del Departamento de Gastroenterología, Hepatología y Enfermedades Infecciosas del Hospital Universitario de Düsseldorf(se abrirá en una nueva ventana). Una de esas posibles consecuencias es el carcinoma hepatocelular. «Si bien muchas personas con esteatosis hepática nunca experimentan problemas graves, algunas desarrollan carcinoma hepatocelular, una enfermedad potencialmente mortal y una de las principales causas de muerte por cáncer en el mundo», agrega Luedde. Con el apoyo del proyecto financiado con fondos europeos PhaseControl(se abrirá en una nueva ventana), Luedde se propuso comprender mejor los mecanismos moleculares que favorecen el desarrollo del carcinoma hepatocelular a partir de la esteatosis hepática.

La muerte celular programada

Según Luedde, el organismo humano ha desarrollado diversos mecanismos que regulan la muerte celular. Este proceso, denominado «muerte celular programada», contribuye a la protección del organismo, por ejemplo, mediante la eliminación de células infectadas por virus. «Nuestra hipótesis era que estos programas de muerte celular podrían activarse en la esteatosis hepática, aumentando la inflamación del hígado y haciendo más probable el desarrollo del cáncer», comenta Luedde. Para estudiar cómo la muerte celular programada contribuye a la inflamación hepática y al desarrollo del cáncer, el equipo del proyecto PhaseControl, financiado por el Consejo Europeo de Investigación(se abrirá en una nueva ventana), utilizó modelos murinos y sistemas de cultivo celular. También se emplearon hepatocitos obtenidos durante trasplantes de hígado. Los investigadores también analizaron datos anonimizados de pacientes para determinar si la medición de la activación de estos programas de muerte celular podría ayudar a predecir qué pacientes presentan un mayor riesgo de desarrollar carcinoma hepatocelular.

Un apocalipsis de células zombi

A partir de este trabajo, se descubrió una forma subletal de necrosis programada denominada «necroptosis». Durante este proceso, se activa la vía de muerte celular de la necroptosis, lo que provoca la apertura de poros en la membrana celular. Aunque muchas sustancias que inducen inflamación hepática y favorecen la progresión del cáncer se liberan a través de estos poros, estas células no mueren y permanecen en un estado subletal. En otras palabras, se convierten en «células zombi». Los investigadores emplearon la microscopía de dos fotones, un método de imagenología puntero, para observar por primera vez estas células zombis. «Creemos que este proceso desempeña un papel esencial en el desarrollo del carcinoma hepatocelular en las enfermedades hepáticas metabólicas», comenta Luedde. En el proyecto también se descubrió que, al activar la muerte celular programada, era posible inhibir el desarrollo de formas muy tempranas de cáncer de páncreas. «Este hallazgo podría abrir la puerta a un enfoque completamente nuevo para tratar el cáncer de páncreas en estadios iniciales», agrega Luedde.

Nuevos métodos para el tratamiento carcinoma hepatocelular

Los datos y resultados obtenidos durante el proyecto PhaseControl forman la base para futuras investigaciones que, a la larga, podrían abrir nuevas vías para tratar e incluso prevenir el carcinoma hepatocelular. Luedde concluye: «Nuestro objetivo es retribuir a los ciudadanos europeos, quienes en última instancia financiaron nuestra investigación, contribuyendo al desarrollo de nuevas estrategias terapéuticas para una enfermedad muy extendida».

Descubra otros artículos del mismo campo de aplicación

Mi folleto 0 0